El fútbol, para los periodistas que trabajan en países en guerra, suele ser una llave útil para abrir la puerta de un nuevo mundo o incluso para salvar la vida.
Mientras la guerra sigue avanzando en Ucrania, el fútbol se abre camino. Surgido en una ciudad llena de recuerdos balompédicos, el Dnipro-1 lidera el campeonato nacional.
El fútbol cuenta relatos para hacernos entender el mundo. En Berna transcurrió uno de esos cuentos. Y Maximilian Wilhelm Morlock fue quien lo protagonizó.
Un país que llevaba años azotado por la guerra y el terror. Y un desconocido que lo condujo a firmar una de las hazañas más imprevistas de la historia.