El senegalés Mame Mbaye falleció el pasado mes de marzo fruto de un infarto en el barrio madrileño de Lavapiés. Tras su muerte, se sucedieron manifestaciones y disturbios en el barrio. Mbaye, al igual que otros muchos senegaleses, era mantero y varios compañeros suyos relacionaron su fallecimiento con una persecución de la policía que se había producido unas horas antes. Poco después, se dieron numerosos enfrentamientos entre los manifestantes y las fuerzas del orden en el mismo barrio de Lavapiés.