Neymar se ha rendido. Y ahora, al darnos cuenta de que los sueños se acaban, pensamos en aquel flechazo del principio, en lo rápido que sucede siempre todo lo que merece la pena.
Messi ha vuelto a caer en la Champions. Por primera vez, sin embargo, entendemos ese revés como un giro previsible, y el escozor es distinto, porque encaja en el guion.
Marco Verratti remite a la sencillez con su juego y su estilo, que huye de lo rococó, no necesita adjetivos, justo lo que necesitamos para hablar de él.