Hay quienes dicen que los buenos futbolistas nunca son guapos. De hecho es, hasta cierto punto, un hándicap. Es como si a los guapos se les exigiese más por el mero hecho de serlo.
Salvatore Schillaci ha fallecido a los 59 años. Algunos todavía vemos sus ojos endemoniados cada vez que celebraba un gol en Italia'90. Fue su Mundial, al que llegó como un desconocido.
España e Italia se enfrentaron por primera vez en los Juegos de Amberes, el torneo del estreno histórico de la selección: acabó con nueve futbolistas, pero ganó.
Tras ganar el Mundial de 2006, sus paisanos le empezaron a llamar 'Campanilla'. Y es que después de ver jugar a Andrea Pirlo, nadie nos puede convencer de que la magia no existe.
El mito de la Juventus ha cumplido 45 años. Para muchos delanteros y aficionados rivales, durante algunos años, su rostro daba tanto miedo como un callejón sin salida.