El delantero ghanés lanzó el penalti duro y arriba, engañando a Muslera. Sin embargo, el balón se estrelló en el travesaño, inmisericorde con el delantero y con toda África.
Rashid y Natxo, ghanés y uruguayo, vieron juntos el agónico partido del Mundial de 2010 entre sus selecciones. Y este viernes repetirán: "Uno de los dos va a pringar".
En 1966, una de las mejores generaciones futbolísticas de la historia no disputó la Copa del Mundo en Inglaterra. El continente africano en bloque decidió boicotear el torneo.