23 de mayo de 2009. Última jornada de la Bundesliga. El campeón, todavía por decidir. El Bayern de Munich necesitará un milagro para reeditar el título logrado el año anterior. Su suerte, en manos de un novato en estas lides, el sorprendente Wolfsburgo. Dos jugadores sobresalen en el equipo entrenado por Felix Magath: el brasileño Grafite y un tal Edin Dzeko, máximos goleadores de la competición. Al club de la Volkswagen le basta un empate en el partido ante el Werder Bremen que se disputa en su estadio para proclamarse campeón por primera vez. Pero este equipo no se conforma con minucias y acaba goleando 5-1 a su rival para redondear la fiesta y consumar la gesta. Este era el primer título oficial del Wolfsburgo en toda su historia, y el único hasta hoy.
¿Qué había hecho el Wolfsburgo hasta entonces? Fundado en 1945, su debut en la Bundesliga no se produjo hasta la campaña 1997-98, lugar que no ha abandonado desde entonces, sumando con esta, 18 temporadas en la máxima categoría del fútbol germano. El quinto puesto era el tope del equipo de la Volkswagen, que solo dos años antes de la consecución del título estaba luchando por la permanencia. De hecho, en las temporadas 2005-06 y 2006-07, el Wolfsburgo terminó en decimoquinta posición, justo fuera de las plazas de descenso. Especialmente dramática fue la primera de las dos, pues ‘los lobos’ se lo jugaron todo en el último partido de liga en su estadio ante el Kaiserlautern. Y un dramático empate a dos les sirvió a los locales para salvar la categoría y condenó a ‘los diablos rojos’. El subcampeonato logrado en la copa en 1995 era el mayor logro del club.
Dicen que cinco años no es nada, pero en este corto lapso de tiempo han cambiado muchas cosas en el club de la Volkswagen. Empezando por el presidente, pasando por el entrenador y acabando en los jugadores. De hecho, solo hay dos supervivientes de aquel equipo campeón: el portero suizo Diego Benaglio (actual capitán) y el lateral alemán Marcel Schäfer. Seis entrenadores han pasado por el banquillo del Wolfsburgo desde que Felix Magath abandonara la nave en 2009: Armin Veh, Lorenz-Günther Köstner (en dos periodos distintos), Steve McClaren, Pierre Littbarski, el propio Felix Magath y Dieter Hecking (actual técnico). ¡Incluso ha dado tiempo a que un español presida el club germano! Francisco Javier García Sanz -anterior vicepresidente y responsable de la llegada de Magath en su primera etapa al frente del equipo- sustituyó a Hans Dieter Potsch como máximo dirigente.
El gran número de entrenadores que han pasado por el banquillo del Volkswagen Arena nos pueden dar una pista de lo que ha pasado en el club en los años posteriores a la consecución de la liga. Pese a que su participación en la Champions League fue digna, y el tercer puesto logrado en la fase de grupos le permitió acceder a la fase final de la Europa League –competición de la que cayó en cuartos-, el declive del equipo a lo largo de estos años ha sido más que evidente. Hasta el quinto puesto de la pasada liga, la octava posición había sido la mejor clasificación del equipo en la Bundesliga. Pero parece que el Wolfsburgo, poco a poco, se ha ido reponiendo de ese pequeño bache.
La llegada de futbolistas de la talla de Kevin de Bruyne (por el que el club pagó 20 millones de euros al Chelsea), Ivan Perisic (ex Dortmund), Nicklas Bendtner (algo venido a menos en los últimos tiempos), Luiz Gustavo o Ivica Olic (ambos procedentes del Bayern) ha devuelto al equipo a la cima del fútbol alemán. Bajo las órdenes de Dieter Hecking, el club ha regresado a Europa y, a falta de una jornada para la conclusión de la fase de grupos de la Europa League, el conjunto germano es segundo y cuenta con muchas opciones de acceder a octavos de final. En la Bundesliga, tras un irregular comienzo –se dejó diez de los 13 puntos que se le han escapado hasta hoy en las cinco primeras jornadas-, el Wolfsburgo es segundo a siete puntos del Bayern, y cinco por encima del tercer clasificado.
De la mano de Kevin De Bruyne -nueve pases de gol, lo que le convierte en el máximo asistente de la Bundesliga y uno de los mejores de Europa- e Ivica Olic -cinco goles- el equipo presidido por un español vuelve a soñar. Cuesta imaginar que se vuelva a repetir la gesta de 2009, pero hoy por hoy ‘los lobos’ son los únicos que pueden dar caza a esa presa indomable llamada Bayern de Munich.