Por novena ocasión consecutiva, la Copa del Mundo contará con Corea del Sur entre sus participantes. Previamente, ya había competido en el Mundial de Suiza’54, pero desde que Diego Armando Maradona se erigiera como un héroe inmortal en el césped del Azteca, en un torneo que precisamente El Pelusa inició enfrentándose a los coreanos, el combinado asiático nunca ha fallado a su cita con el Mundial. Y, pese a ser un fijo en la mayor fiesta balompédica del planeta, sus actuaciones han pasado casi siempre desapercibidas. Corea del Sur ha naufragado en todas las fases de grupos en las que ha estado presente, excepto en dos ocasiones.
La primera de ellas, en Corea y Japón’02, será recordada eternamente por la afición italiana y por la española, que cayeron ante la anfitriona en octavos y en cuartos de final, respectivamente, tras dos de las actuaciones arbitrales más polémicas que se recuerdan en una Copa del Mundo. En semifinales, Alemania se encargó de eliminar a los coreanos con un solitario gol de Michael Ballack. Y, finalmente, la segunda y última vez que el país asiático pasó de la fase de grupos fue en el Mundial de Sudáfrica, aunque Uruguay la eliminó en octavos gracias a los dos tantos que anotó Luis Suárez.