Arranca un nuevo año, y como no somos capaces de dejar atrás nuestros vicios mugrientos (ya hace tiempo que aprendimos que eso de proyectar propósitos imposibles en Nochevieja es una pérdida de tiempo), hemos decidido formulárselos a un puñado de jugadores y equipos de las principales ligas de Europa que están bajo la luz de un foco que les incomoda. Tirando de estadística, y teniendo en cuenta lo que ha dado de sí esta primera parte de la campaña 2015/2016, nos vamos hasta el farolillo rojo de diversas clasificaciones. Escapar de los defectos todavía es posible. O no. Mejor hablamos en julio.
1. PASAR MÁS VECES LA PELOTA
Guardiola será mucho Guardiola, sí, pero hace poco ya tratamos de demostrar en esta web, y con la ayuda de varios gráficos, que el impacto en la Bundesliga del fútbol de asociación de Pep se ha reducido a su coto privado en Múnich. Solo así se explica que el equipo que menos pases ha dado de momento en toda la temporada en Europa haya sido el Darmstadt (4.272), también alemán. Aunque dudamos que los jugadores de este humilde club vayan a hacer mucho caso a este propósito que les lanzamos para el año nuevo, puesto que el Darmstadt, colectivo que ascendió a la primera división germana el año pasado, está consiguiendo por el momento su principal objetivo de la campaña: mantenerse fuera de los últimos puestos de la clasificación. Aunque a algunos les pese (a Guardiola, el primero, seguro), el estilo pragmático y poco adornado sigue recogiendo ejemplos que prueban su efectividad matemática. Ahora habrá que ver qué tal se sostiene esta teoría en 2016.
2. APRENDER A CONTROLAR EL FUERA DE JUEGO
La voracidad del delantero Bafétimbi Gomis no ha hecho más que aumentar desde que diera el salto a la Premier League. Catapultado por las expectativas que se generaron en torno a él cuando debutó siendo una joven promesa en la Ligue 1, tan exageradas que la mayoría de ellas le siguen pesando en el dorso, el ariete francés se mudó al Reino Unido con ganas de callar bocas y de recuperar el prestigio perdido, si es que alguna vez lo tuvo. No le ha ido del todo mal, aunque la intensidad con la que se emplea sobre el césped le juega algunas malas pasadas. Gomis se pasa los partidos huyendo a toda castaña, como si escapara del fantasma de esa estrella que tenía que ser y de la que apenas rozó un vértice en un par de temporadas. Y eso, en un deporte que a veces se mide con escuadra y cartabón, es un riesgo a tener en cuenta. A día de hoy, la referencia ofensiva del Swansea es el futbolista que ha registrado más fueras de juego de todas las grandes ligas de Europa (31). Su inmediato perseguidor es Timo Werner, del Stuttgart. Si baja una marcha, calcula mejor los tiempos y le pierde el miedo a su futuro, igual Gomis se aproxima más en 2016 a eso que tanto teme: ser uno de los mejores delanteros del fútbol inglés.
3. REDUCIR LAS PATADAS AL RIVAL
El año que se cierra en el fútbol francés deja básicamente un par de lecciones encima la mesa. La primera es que al PSG no se le puede ganar ni a los dados, lo cual no habla muy bien del nivel competitivo que existe en Francia. Y la segunda es que cuando te enfrentas al Nantes, mejor priorizar las espinilleras a los goles. El cuadro que entrena Michel Der Zakarian es el que más faltas ha cometido en lo que llevamos de curso (317). Una pesadilla para los atacantes rivales. Aunque esa fama de bad boys que persigue a los de los Países del Loira les ha ayudado a esquivar la zona de descenso, tampoco es que les haya valido para hazañas demasiado valiosas. Tal vez si el Nantes aparcara durante un tiempo su obsesión por los tobillos del adversario podría mejorar el 13º puesto que ocupa ahora mismo en la clasificación de la Ligue 1.
4. AFINAR MEJOR LA PUNTERÍA
Atención, se advierte: el dato que se presenta a continuación, por muy gordo que sea, puede resultar engañoso, como casi todo lo que se comenta últimamente sobre Cristiano Ronaldo, un astro en declive (según lo que se dice) pero que, sin embargo, yendo supuestamente a la deriva, sigue reventando todos los sacos de los récords. El estandarte portugués del Real Madrid es con diferencia el jugador de Europa que más disparos registra fuera de los tres palos, contando hasta 49. Pero el caso es que esta estadística debe complementarse con otra que despeja varias dudas: el extremo suma al mismo tiempo 45 disparos que sí van a puerta, otro dato gigantesco si lo medimos a escala continental. Dejamos la interpretación de este par de recuentos al gusto y tiempo de cada lector. Pero no hace falta demasiada meditación para constatar que, si en 2016 Ronaldo limpiara ni que fuera un poco el cañón de su escopeta de feria, su cuenta goleadora podría pegar un bote considerable.
5. ADJUDICARSE MÁS PARADAS
La Fiorentina se despide de 2015 aupada a los primeros puestos de la Serie A, un hito entusiasta y que hace brotar el optimismo en las gradas del Artemio Franchi. El Inter de Mancini, hasta el momento, es el único conjunto que les está aguantando el pulso a los pupilos de Paulo Sousa, que por fin van lanzados a un reto de los grandes. Soñar con ganar la liga son palabras mayores en Florencia, pero todas ellas se han ido empequeñeciendo a medida que se ha ido prolongando el buen estado de forma de los ‘viola’. Solo hay un detalle que siembra algo de preocupación: aunque no le llegan mucho por el buen hacer defensivo del colectivo, Ciprian Tatarusanu es el guardameta titular de las principales ligas europeas que colecciona menos paradas por encuentro (1’4). Si el rumano se viste más veces de salvador en 2016, la ‘Fiore’ podría acabar de aniquilar el complejo de inferioridad que le ha ido persiguiendo en las últimas décadas.
6. ESCOGER MEJOR CUANDO DRIBLAR
A Wilfried Zaha le va la marcha. Fuera de los terrenos de juego (no es momento para recordar ahora el affaire que mantuvo con la hija de Moyes, ciclópea pillada del suegro de por medio), pero también dentro de los mismos. El atacante del Crystal Palace, otro que apuntaba muy alto pero cuya proyección se ha ido difuminando con el paso de las temporadas, es el futbolista que colecciona más regates fallidos (63) tras los primeros meses del curso 2015/2016. El individualismo pone nervioso a cualquiera que esté viendo un partido de fútbol, pero todavía más cuando quién capitanea las filigranas no sale vivo de la mayoría de los intentos. Pásala un poco más, Wilfried, ni que sea un poquito, y así igual incluso te da el indulto ese entrenador que hace poco plegó en la Real Sociedad.
7. NO PERDER TANTOS BALONES
Ryad Boudebouz haría bien en pedirles a los reyes magos algo más de precisión para cuando tenga el balón en los pies. El centrocampista del Montpellier tiene el dudoso honor de ser el futbolista que más robos ha sufrido en lo que llevamos de temporada, con 69 pérdidas de pelota. La verdad, sin embargo, es que este defecto de distracción tampoco le ha costado al argelino muchos minutos en el banquillo, puesto que presume en el presente curso de haber participado en 19 encuentros (1563 minutos).
8. DARLE MÁS AL COCO
El Villarreal tiene en sus manos (en la testa de sus rematadores, más concretamente) la oportunidad de hacer volar por los aires este nuevo capítulo de nuestra clasificación para fin de año. Los de Marcelino juegan el último partido del 2015, recibiendo en casa al Valencia. Y si consiguen al menos mover una vez el marcador con un cabezazo ante sus rivales chés, podrán dejar atrás un dato que no es que les deje por las nubes, precisamente. Hoy por hoy, los castellonenses son uno de los dos equipos europeos que aún no han marcado ningún gol de cabeza durante el curso. El otro conjunto que todavía no encuentra la suerte por alto es el Troyes. Soldado, Bakambu o Musacchio ya han tomado nota. Veremos cómo dominan las alturas en el último compromiso que tienen previsto para antes de comerse las uvas.
9. ACUMULAR MENOS TARJETAS ROJAS
Ser el único en algo te hace especial. Ser señero, aunque sea de cualquier tontería, te permite afrontar el día relajado, complacido, como si todo el resto de las cosas que te quedan por hacer durante la jornada fueran secundarias. Tú ya lideras una lista, ¿por qué preocuparte por nada más? Pero, ojo, porque incluso en ese tipo de placeres uno también puede pillarse los dedos. A Granit Xhaka, pieza angular del Borussia Mönchengladbach, le pasa algo inquietante. El centrocampista suizo es el tipo que ha visto más tarjetas rojas en lo que llevamos de campaña: 3. Y, claro, por mucho que eso le sitúe en la cúspide de una clasificación, cosa que agradece sobremanera, también le limita las opciones de jugar y de sumar más minutos sobre el campo, algo truculento para cualquier deportista profesional. Xhaka, interior que llega tan pronto al área contraria como tarde en la mayoría de choques que se producen contra el adversario, descorchará el 2016 con ganas de cambar de ranking.
10. DOMINAR MEJOR LAS ALTURAS
Colocar al bueno de Jamie Richard Vardy en este ranking de renqueantes podría parecer un intento de ensuciar su excelsa irrupción en 2015, pero nada más lejos de la realidad. Esperamos que el ariete del equipo de moda en Inglaterra se tome esta puntualización estadística como un consejo para que las cosas todavía le vayan mejor en este nuevo año que asoma. Lo cierto es que, goles y rendimiento general aparte, Vardy también figura como el jugador de las grandes ligas del viejo continente que más duelos aéreos ha perdido este curso (123). Los motivos de esta pega a su valoración pueden ser muchos, y probablemente la mayoría no lo señalen a él como principal culpable, sino más bien a sus compañeros de equipo, que le buscan en exceso por alto en vez de entregarle el balón al pie. Ahí lo llevas, Vardy. Igual con esta información te vale para acabar de incrustar la última joya a tu sorprendente corona.