Es inevitable que, al pensar en récords futbolísticos, a cualquier amante de este deporte se le pase por la cabeza un pequeño argentino o un musculado portugués. Y es que la hegemonía compartida entre Messi y Cristiano ha sido irrompible en estos últimos diez años. Dejando de lado títulos individuales o colectivos, entre ambos se han venido repartiendo los registros más importantes de la élite. No solo son los máximos goleadores históricos del Barça y del Real Madrid: el argentino lidera la tabla de máximo anotador de la Liga mientras que el portugués hace lo propio en Champions.
Lo mismo ocurre cuando hablamos de selecciones. En este caso, Ronaldo supera a Leo como jugador en activo con más goles con su combinado nacional. El de Madeira ostenta el récord absoluto al haber anotado 85 goles en los 154 partidos que ha jugado con la zamarra de Portugal. El rosarino, al congelar su relación con la albiceleste tras caer eliminados del Mundial de Rusia, dejó su registro en 65 tantos. Han sido el primer y segundo clasificado en estos registros hasta que un futbolista poco conocido lejos de las fronteras de su país ha desbancado al genio argentino.
Más allá de los más de 1.000 goles que suman entre ambos; más allá de las jugadas de ensueño que nos han dejado -y nos dejan-; más allá de la algarabía atronadora en las gradas de los grandes estadios; más allá del imponente fútbol europeo, un futbolista indio se ha atrevido a cuestionar su reinado. Su nombre, Sunil Chhetri. Enfundado con los colores de India, el delantero de 34 años está destacando con los Tigres Azules en esta Copa de Asia. Su récord llegó con el debut del combinado nacional en el torneo de selecciones. Un doblete ante Tailandia permitió al jugador nacido en Secunderabad alcanzar la cifra de 67 goles y superar a Leo en la clasificación. Pero el hito de Chhetri no se resume en esos dos únicos goles. Los tantos que anotó en el partido inaugural de su selección permitió a los indios sumar su primera victoria en la Copa Asia desde 1964 y arrancar el torneo con buenas sensaciones.
Su historia en este deporte, como la de muchos otros, comienza con un jovencísimo jugador que despunta en su país natal. Con la camiseta del Mohun Bagan, que vistió entre 2002 y 2005, el delantero anotó seis goles. Al acabar la temporada, el futbolista firmó por el Jagatjit Cotton and Textile Football Club -abreviado, habitualmente, como JTC- y comienzó a despuntar como delantero de referencia. Sus goles llevaron al equipo a las zonas altas de la clasificación durante las tres temporadas que permanece en el club. Más tarde, completó excelentes actuaciones con la selección de Delhi en el Santosh Trophy (competición de equipos disputada por las diferentes regiones de India), anotando varios hat-tricks. En 2007, después de cuajar una gran temporada, logró el premio al Jugador del Año entregado por la All Indian Football Federations (AIFF), la federación india.
Su fútbol comenzó, entonces, a traspasar fronteras y varios clubes europeos se interesaron por su situación. Sin embargo, la llamada europea no le llegó exenta de problemas. “Me encantaría jugar en Europa como David Villa. Inglaterra estaría bien y tenemos conversaciones, pero hay problemas con los permisos de trabajo”, declaró en 2008 el delantero indio a medios locales. Tanto el Leeds United inglés como el Estoril Praia portugués trataron de hacerse con sus servicios, pero todas las esperanzas quedaron en papel mojado por problemas burocráticos. Ese mismo año, en 2008, Chhetri también logró un gran registro anotador con la selección, marcando ocho goles en los 13 partidos que disputó.
Continuó su carrera en India, enrolado primero en las filas del East Bengala y, posteriormente, en las filas del Dempo. En ambos clubes, el delantero siguió alimentando su cifra goleadora. Por ello, el interés extranjero volvió a llamar a sus puertas. En este caso, fueron los escoceses del Celtic los que fijaron su mirada en el indio, después de verlo competir en un partido ante el Santboià, club catalán que militaba, en aquel momento, en tercera división. No obstante, fue el Queens Park Rangers quien logró firmarle. Por desgracia para él, Inglaterra no le concedió el permiso laboral y el futbolista no pudo ver realizado su sueño. “No es el fin del mundo. Seguiré trabajando duro para mi país y para mi club”, dijo el futbolista a medios indios tras su fallido traspaso.
En 2010 llegó, por fin, su gran oportunidad al firmar con el Kansas City Wizards de la Major Soccer League. Su periplo por tierras norteamericanas tan solo duró unos pocos meses, pues fue convocado por India para la Copa Asia. En 2011, el jugador regresaría a su país para jugar de nuevo con Mohun Bagan, club del que ya había formado parte en sus primeros años de profesión. Ese también sería el año del atacante con la selección. Con los Tigres Azules, Chhetri anotó 13 goles en los 17 partidos que disputó.
Quizás fueron esos números los que propiciaron la llamada desde Portugal que llevó a Chhetri al Sporting de Portugal. Pero su aportación, todo sea dicho, fue ínfima. Tan solo jugó unos pocos partidos con el equipo filial antes de regresar, en calidad de cedido, al Churchill Brothers de la liga india. Y en su país se quedó, sin más viajes exóticos en el horizonte para probar suerte lejos de su fútbol. Tras una temporada en Bengaluru, el futbolista se marchó al Mumbai City. Sin embargo, un año después regresó al equipo con sede en Karnataka. Club al que hoy, a sus 34 años, todavía pertenece.
A pesar de su veteranía, el delantero es el referente de una selección que ha mejorado notablemente durante estos años. Una mejora causada por la creación de la Superliga India. “Esta mejora se ha producido porque han llegado muchos profesionales a la competición. Futbolistas que son referentes y que han ayudado esta expansión”, declara a Panenka Jofre Mateu, exjugador del Goa que también compitió en clubes españoles como el Levante, el Espanyol o el Barça. “Se están implantando rutinas de alimentación, entrenamiento y demás que aquí se dan por sentadas, pero que en la India no se llevaban a cabo”, asegura. Además, Jofre también destaca la influencia de este crecimiento en el devenir de la selección. “Todo esto también repercute de manera positiva en la selección”, sentencia.
Con Chhetri en la punta de ataque, el combinado indio trató de completar una buena actuación en el torneo de selecciones asiático. Tras un prometedor arranque ante Tailandia, en el que India venció por 1-4, la selección cayó ante Emiratos Árabes por 0-2 en el segundo partido de la fase de grupos. En el tercer y último encuentro, el combinado indio perdió por 0-1. Atrás quedó Messi, quizás una hazaña anecdótica para él, y también el sueño de hacer historia con la selección. Pero en su país recordarán su legado y sus goles para la historia.