Ya es oficial. Clarence Seedorf es el técnico que ha elegido el Deportivo para intentar reorientar el desastroso rumbo del equipo coruñés en lo que resta de temporada. Y como todavía no ha habido tiempo suficiente para hacerse una idea definida de su perfil como preparador -solo ha dirigido al Milan y al Shenzhen chino, y ambas etapas duraron menos de un año-, hemos decidido descomponer la entrevista que Roger Xuriach le hizo para el #Panenka51 (abril de 2016) con tal de intentarnos aproximar un poco más a su ideario. Por lo que se desprende de sus palabras, que aquí agruparemos en bloques temáticos, en su libreta no hay fórmulas mágicas ni aspiraciones cortoplacistas, pero sí están presentes conceptos como el ‘fútbol total’ y la competitividad italiana, dos atributos que aprendió a combinar de corto hasta convertirse en uno de los mejores futbolistas holandeses de todos los tiempos.
1. UNA VOCACIÓN QUE VIENE DE LEJOS
¿Siempre tuvo claro que entrenaría?
Siempre supe que la voluntad de querer ser entrenador me ayudaría en mi crecimiento como futbolista. Fui un jugador muy atento y cercano a los técnicos. No en la toma de decisiones, obviamente, pero sí participando en el proceso, ayudando a resolver dudas. En Botafogo fue especial porque casi fui jugador-asistente, analizando los partidos con la gente del staff, siempre con un gran respeto por su jerarquía, pero dando mi punto de vista. Prácticamente desde que debuté, me puse en la piel del entrenador.
¿Y a quién tiene como referencia?
Me llevo experiencias e ideas de todos los técnicos que he tenido, pero es imposible copiarlos. Quiero desarrollar mi propio modelo. He de decirle que me encanta la filosofía de Phil Jackson, el entrenador de los entrenadores, una gran inspiración para mí. Si él pudo ganarse a los más grandes del baloncesto, quiero creer que yo también puedo hacerlo con los mejores futbolistas. He absorbido todo lo que he podido de entrenadores como Van Gaal, Capello, Ancelotti… También lo que menos me gustaba de ellos, que es lo más importante para no cometer los mismos errores en el futuro. En cualquier caso, debo agradecerles que me abrieran siempre sus puertas para dejarme ver su ‘laboratorio’.
“Quiero desarrollar mi propio modelo”
2. ENEMIGO DEL CORTOPLACISMO
España no es el paraíso de la larga duración para un técnico.
Bueno, larga duración en España pueden ser tres años. Creo que cuando un club está convencido del técnico que escoge no debe tener problemas en dar contratos largos. Hay muchos clubes en el mundo a los que les gustaría tener un hombre y una idea para seguirla durante un tiempo. Pero se acaba imponiendo el miedo a perder.
Hay algo aún más perverso. Cuando un ‘grande’ no gana la Champions decimos que ha fracasado…
Nos estamos volviendo un poco locos, ¿verdad? Solo un equipo puede ganar la Copa de Europa cada año y obviamente no puedes ganarla siempre. Es la ley del deporte. No ganas siempre. Punto. Siento que estamos muy frenéticos; ser exigente es una cosa, no usar la razón es otra. Por esta regla de tres el 99% de los equipos deberían cambiarlo todo, de arriba a abajo, cada año. Espero que termine esta dinámica porque no le hace ningún bien al fútbol.
“Se acaba imponiendo el miedo a perder”
3. INFLUENCIADO POR VAN GAAL
Nadie más ha debutado tan joven con el Ajax desde que lo hizo usted. ¿Hubiera sido posible sin Louis?
Se dieron las mejores circunstancias. Fue el técnico perfecto para una generación importante. Tenía mucha química, le gustaba y le sigue gustando apostar por los jóvenes, es una de sus características. Siempre le estaré agradecido por su confianza.
Enseguida le dio la titularidad en el flanco derecho del centro del campo.
De hecho, después de mi debut llegó a decir en una entrevista que yo iba a ser el jugador del nuevo milenio. Sin presión, ¿eh? Espero que, echando la vista atrás, pueda estar orgulloso de mí. Y de él mismo, por haber descubierto que no se equivocó [risas].
“Siempre le estaré agradecido a Van Gaal”
4. CONFIANZA EN LA JUVENTUD, PERO LA JUSTA
¿El fútbol necesita más técnicos como Van Gaal, que apuesten por los jóvenes?
Hay muchos que dan oportunidades a jóvenes… incluso demasiados. Me explico: una cosa es dar protagonismo a los jóvenes y la otra es darles toda la responsabilidad. En nuestro Ajax había jugadores con experiencia: los De Boer, Blind, Rijkaard… Esa combinación fue fundamental para encontrar el equilibrio. En Europa se exagera cuando algunos clubes buscan grandes resultados solo con jóvenes. Porque, al final, acaban quemados y algunos no están preparados para llevar el peso de estos equipos a sus espaldas. Y es comprensible: nosotros crecimos sin aquella presión. Así es como debería ser, en el fútbol y en la vida. Algunos pueden hacerlo, pero no todos. Y eso se traduce en los muchos jóvenes que dan pasos más largos de los que realmente pueden dar.
“En Europa se exagera cuando algunos clubes buscan grandes resultados solo con jóvenes”
5. COMPETITIVO GRACIAS AL CALCIO
¿Cómo fue dejar el Ajax y recalar en la Sampdoria?
Difícil. Venía de una cultura de mimar el balón, tocarlo desde atrás… ¡Fútbol total! Y claro, en mis primeros partidos en Italia voy a pedir el balón al central y… ¡Pum! Lo lanza por los aires hasta llegar al delantero. Entonces miro al delantero para ver si me la devuelve y… se gira para hacer sus cosas. Estaba perdido y muy nervioso, realmente frustrado. ¡Por primera vez en mi vida estaba tocando muy pocos balones! Para alguien que venía de un equipo donde los 11 jugadores lo tocábamos unas 50 veces por partido, fue muy duro.
¿Qué le dijo Eriksson?
Cuando Eriksson vio que estaba llegando a mi límite me cogió y me dio una lección que nunca olvidaría. Me preguntó que por qué me quedaba parado. Y yo le dije: ”si no me pasan el balón, me quedaré más quieto”. No era lo justo, lo sé, pero era joven y estaba ahí para aprender [risas]. Entonces me explicó una historia que no tenía nada que ver con el fútbol: me dijo que pensara en los trabajadores que se levantan a las seis de la mañana y en cómo la sociedad los observa con orgullo por la calle. ”Piensa en esto y descubrirás cómo aplicarlo a tu fútbol”.
¿Entendió el significado de aquello?
Lo entendí más adelante. Al principio seguía preguntándome: ¿Por qué tengo que correr detrás del balón si puedo ubicarme en el medio de dos rivales, para que el que tenga el balón no pueda dársela al otro? Si estoy en el punto correcto, ya estoy bloqueando el pase, ¿no? Quien entiende de fútbol puede ver estas cosas. El que no, pensará que soy un vago. En el fondo, estaba usando mi inteligencia y conocimientos para economizar esfuerzos. Crecimos así en el Ajax, ”economiza siempre que puedas”. Cuando el rival tenía el balón no corríamos como locos, nos posicionábamos de tal forma que podías interceptarlo a distancia provocando su error. Solo la presión conjunta es eficaz.
Tuvo que adaptarse a un nuevo fútbol.
Tuve que cambiar todos mis principios. Fue el día en el que aprendí a sobrevivir en el fútbol, el día en el que entendí que los aficionados y los medios influyen en las ideas de los jugadores, de los clubes, de los entrenadores… Y me dije: ¿por qué voy a hacer algo que va a perjudicarme? Correré, haré esa presión y si no llego, haré otra. Si es lo que la gente quiere ver y entiende… Además, estaré demostrando a mis compañeros, a mi entrenador y a la afición que tengo voluntad. La misma percepción de la que Eriksson me hablaba cuando se refería a la gente que va a trabajar tan temprano. Comunican sacrificio.
¿Nació un nuevo Seedorf?
Empecé a utilizar estratégicamente esta agresividad, cambió mi forma de interpretar el fútbol. En el Ajax éramos un todo pero en Italia era yo el que debía adaptarme. Aquel aprendizaje fue enorme.
“Solo la presión conjunta es eficaz”
6. ALUMNO DE DON FABIO EN MADRID
A Capello le gustaba crear conflictos…
Era el maestro de la manipulación. Si veía que el vestuario estaba muy relajado, contábamos hasta diez y ya estaba buscando pelea con alguien. Era un provocador nato. Con más de diez jugadores nuevos, Capello supo llevar aquel grupo muy bien, aunque, infelizmente, solo por un año.
Pero menudo año. Se volvió a Cibeles a celebrar un título de Liga.
Con aquella Liga el Madrid volvió a decir ‘Aquí estoy yo’, recuperando la imagen y la dimensión de club más grande del mundo. Lo cual también es fruto de la rivalidad con el Barça. Siempre digo lo mismo: si uno de los dos no estuviera jugando en la Liga, el valor de ambos sería menor. Nunca olvidaré mi primer ‘Clásico’…
Cuénteme.
¡Gente durmiendo en la calle para comprar entradas para el Bernabéu! Hoy en día, con Internet, sacas el ticket desde casa. Pero ahí estaban, con sus tiendas de campaña. ”No es posible”, le dije a Roberto Carlos. Y él me explicó que sí, que así funcionaba esto. Sentí una emoción brutal.
¿Le gustaría importar la filosofía de Capello a los clubes que aspira entrenar?
No. En ese sentido soy muy distinto. Fabio tiene un método a corto plazo, el mío es más de largo plazo. Capello era increíble desde el banquillo, cómo leía los partidos era impresionante. Exprimía a los jugadores al máximo. Pero tenía una gran virtud: solo era exigente en el campo; fuera era uno más y se tomaba algo con nosotros en el bar. Seguramente su estilo tiene un efecto inmediato, y por eso nunca trabaja más de tres años en ningún lugar. Si uno quiere trabajar más tiempo con el mismo grupo, esta filosofía no puede ser aplicada. Tendría que ser más lo de Carlo Ancelotti. Son dos extremos, lo sé. Creo que ahí en el medio ando yo.
“Soy muy distinto a Capello”
7. CARLO ANCELOTTI O ENTRENAR DESPUÉS DE HABER SIDO FUTBOLISTA
¿Qué saca Ancelotti de usted para vivir su mejor etapa como futbolista?
Al Milan llegué con 26 años y creo que eso lo dice todo. Tenía diez años de experiencia en este mundo. Luego había un grupo muy experimentado y los resultados llegaron rápido. Creo que era hasta cierto punto lógico pensar que iba a desarrollar mi mejor fútbol. Es normal que la gente recuerde los últimos años del Milan pero los años anteriores también fueron importantes. Con esa experiencia pude vivir con menos estrés las cosas. Además, nunca he tomado alcohol, ni he fumado, siempre he entrenando bien.
¿El técnico que es exfutbolista, caso de Ancelotti, se gana mejor al vestuario?
Es un extra. Pero el respeto de los jugadores lo pierdes enseguida. Para mí un grupo profesional tiene respeto por el entrenador siempre, sea quien sea. Pero sí es cierto que los hay que necesitan aquel exjugador que ha visto jugar o con el que directamente ha compartido vestuario. Pero insisto: esa fuerza se pierde si no demuestras estar preparado.
“Un grupo profesional tiene respeto por el entrenador siempre, sea quien sea”
8. CONOCEDOR DEL ‘FÚTBOL TOTAL’
Pirlo-Gattuso-Seedorf. Pero el ‘fútbol total’ no es solo centro del campo…
El ‘fútbol total’ es que todos los jugadores, incluido el portero, piensan de la misma manera. Buscan las mismas soluciones, reconocen las mismas dificultades, tienen una buena comunicación entre ellos. Luego hay jugadores en el campo que deben proteger esta filosofía y los puntos fuertes del equipo, son los líderes, que protegen la identidad del equipo en momentos de dificultad. Porque hay veces que los conjuntos que no están tan formados tienen un plan para jugar desde atrás pero cuando no lo consiguen a la primera y a la segunda… rifan el balón. Ahí debe haber un líder que diga ‘no’, vamos a seguir jugando de esa forma porque si no lo hacemos, el adversario cambiará de mentalidad.
¿Sigue vivo el ‘fútbol total’? ¿O asistimos a una paulatina verticalización?
Verticalizar es fundamental para ganar partidos. La posesión siempre debe ir en función de crear peligro, porque el objetivo es siempre hacer goles. Para eso hay que tener a jugadores determinados. Cada entrenador tiene que entender a sus jugadores, sus características, para que el estilo saque lo mejor de ellos. En general hay entrenadores que son muy buenos en inocular esta filosofía y hacer que los jugadores la implementen los 90 minutos. Lo veo, por ejemplo, en equipos como el Arsenal y el PSG.
“Verticalizar es fundamental para ganar partidos”
9. HIJO DE UN SISTEMA
¿El ‘fútbol total’ es el estilo que le gustaría aplicar?
Bueno, yo he crecido con esta filosofía. Y para mí es fundamental, en cualquiera de sus modalidades. Pero tampoco veo un estilo mejor que otro. En el fútbol hemos visto ganar títulos de todas las formas. Gana el que sabe exprimir mejor su filosofía, con más consistencia y determinación. En el fondo, ese es el trabajo del entrenador: que sus pupilos sigan su idea. Por ejemplo, Klopp tenía una apuesta muy clara y eficaz en el Dortmund: el contraataque. Atrás esperando y velocidad impresionante para salir. Y tenía a los jugadores perfectos para hacerlo. Luego ha logrado trasladar este estilo a otro club.
Si me permite abrir otro debate, también se puede ganar sin jugar bien…
¡Lo hemos visto tantas veces! Mire a Italia, sin espectáculo ganó un Mundial. Es algo que no se puede ignorar. España ha tenido durante muchos años dificultades para ganar hasta que descubrió que para hacerlo necesitaba jugar bien. Pero también jugaba bien Holanda y mira… Al final siempre es mejor jugar bien y ganar, pero si no juegas bien es mejor ganar.
“No veo un estilo mejor que otro”
10. CRÍTICO CON EL MODELO DE LA EREDIVISIE
¿Veremos a otro Ajax como el del ’95?
Yo creo que sí. No creo que el dinero sea la razón principal para que un club no pueda competir ni aspirar a grandes objetivos. Sinceramente, creo que es posible pero hay que hacer cosas para provocarlo. Lo dije antes, si no se integra experiencia en esos equipos será imposible. El trabajo técnico y táctico en Holanda sigue a un gran nivel, pero no es suficiente. ¿Por qué no se convence a jugadores expertos para que regresen a esa liga? Con la misma lógica que exageramos con la que se pide todo a los jóvenes, a los 32 años decimos que un jugador es viejo. Y no es así: hay muchos que llegan a esa edad y que podrían jugar a un buen nivel en Europa. Bueno, pues esos son los jugadores que yo buscaría si fuera Ajax o PSV para dotar de personalidad al equipo. Es lo que hizo Rijkaard viniendo del Milan al Ajax. Nigel De Jong pudo hacer lo mismo, pero… No es falta de jugadores, es falta de filosofía. Los hay que quieren seguir en Europa, y los hay que quieren buscar dinero, otro estilo de vida o tranquilidad.
“No creo que el dinero sea la razón principal para que un club no pueda competir”