Situado a apenas diez minutos al norte del centro de Zadar, ciudad donde nació Luka Modric, está situado un pequeño y tranquilo pueblo de pescadores llamado Petrcane. Años atrás, dicha población era conocida por sus numerosos festivales de verano que llenaban los campings y sus playas de jóvenes mochileros llegados de toda Europa. Esos años de apogeo quedaron atrás y hoy en día en Petrcane hay poco que hacer, por no decir nada. Y ahí estaba yo, el 9 de agosto de 2013, a las 17h de la tarde asomado al balcón de nuestra habitación alquilada. Frente a nosotros se extendía una balsa tranquila; el Adriático, que se pierde entre las numerosas y pequeñas islas de la costa dálmata.
Ante el panorama de una tarde sin nada que hacer que no fuese una larga siesta, decidimos meternos en el primer bar que encontramos, situado delante de los embarcaderos del pueblo, y nos acomodamos en su terraza. Enseguida salió un joven camarero que nos preguntó qué íbamos a tomar. Quizás por aburrimiento y con ganas de dar algo de emoción a esa calmada tarde le preguntamos por algún tipo de alcohol típico de Croacia. El camarero sonrió y enseguida volvió con una botella que contenía un líquido totalmente transparente. Rakija. Y así, a base de chupitos de un licor con una graduación cercana al 60%, empezamos a charlar con el camarero ya que no había nadie más en esa terraza. Y el tema por excelencia para empezar una conversación entre unos chicos de Barcelona y un chico de Petrcane no fue otro que el fútbol. El Barça, la selección española, Luka Modric, el Dinamo o el Hajduk Split… y Halilovic, por supuesto.
Cuando apareció el nombre de Alen Halilovic todo cambió. Este zurdo de tan solo 17 años es el orgullo de todo el país balcánico. Incluso en la costa, en Petrcane, donde lo más normal es ser del Hajduk Split, no hay reparos en reconocer que Halilovic tiene un áurea especial, por muy jugador del Dinamo de Zagreb que sea. El camarero se deshizo en elogios hacia el centrocampista y le alegró saber que lo conocíamos.
Nos recordó que es el jugador más joven de la historia en debutar con la selección absoluta y que también era quién había debutado en Champions League con menor edad. Fue en un partido ante el PSG y la inocencia de Halilovic se vio reflejada en una fotografía con el gigante Ibrahimovic. Entonces decidió sacar su teléfono móvil y enseñarnos de lo que era capaz ese muchacho.
Escogió varios vídeos donde pudimos ver una recopilación de regates, asistencias, goles y disparos del joven croata. Siempre con un estilo muy particular, Halilovic conduce el balón bien pegado a su bota izquierda y supera a rivales con suma facilidad. Es un mediocampista con visión de juego, de los que destacan más por su último pase que por sus llegadas desde segunda línea.
Muchas de las jugadas que aparecían en los vídeos tenían un patrón similar. Halilovic arranca en la derecha del ataque de su equipo, y con la pierna izquierda encuentra una solución ya sea con el desborde hacia adelante o bien con su mirada periférica para escoger la mejor opción, utilizando todas las superficies del pie para ello.
Varios vídeos después ya nos había convencido de que aquel chaval, a pesar de su corta edad, jugaba con una facilidad pasmosa. Es la sensación de todo el país, que se maravilla con cada control o regate de la ‘joya adriática’, como es conocido por sus compatriotas. Aún no es un fijo en la selección, pero este chico melenudo quizás acabe siendo una de las grandes sorpresas en la lista de Kovac. Croacia debutará en el Mundial de Brasil precisamente ante el conjunto anfitrión, en el partido inaugural del campeonato.
Cuando dejamos de hablar de Halilovic, hijo y hermano de futbolistas, nuestro nivel de alcohol ya era suficiente como para fantasear con su llegada a la liga española. Quizás a Zubizarreta también le dieron a probar Rajika cuando viajó a Croacia…