PUBLICIDAD

2017, ni Mundiales ni Eurocopas

En este nuevo año las mejores competiciones a nivel de selecciones se tomarán un respiro y cederán el protagonismo a África, la Concacaf y el fútbol femenino

“Años impares, veranos de luto”. Ese podría ser el refrán para los futboleros del Viejo Continente. Sin un Mundial ni una Eurocopa a la vista arranca este 2017, en el que tampoco podrán contar con su querida Copa América los aficionados sudamericanos. Para el baúl de los recuerdos han quedado ya los éxitos y los fracasos del año pasado. Algunos esbozarán un sonrisa de oreja a oreja cuando, con el paso del tiempo, se les pregunte por lo que sucedió en aquel lejano 2016. Aquel año en que Portugal superó sus traumas de antaño y por fin pudo celebrar su primer título continental, coincidiendo con esa Premier League tan impredecible que ensalzó a un Leicester casi desconocido guiado por Claudio Ranieri y coexistiendo con la eclosión definitiva de la selección chilena, que repetía hazaña en la Copa América. Otros, en cambio, se lamentarán cuando recuerden algunos capítulos de esos 365 días, que les dio alegrías pero también momentos para el olvido. Argentina guardará con dolor la imagen de Leo Messi llorando sobre el césped del MetLife Stadium de Nueva Jersey al ver como se le escapaba otra oportunidad para salir campeón y atléticos y franceses se unirán en el luto de Antoine Griezmann al rememorar las finales de la Champions League y la Eurocopa.

Aparcado ya el 2016, y sabiendo que no podremos gozar de las mejores competiciones (masculinas) a nivel de selecciones, el nuevo año también contará con algunas citas importantes. Los aficionados del continente africano cuentan los días para que empiece su particular torneo continental y las redes de ojeadores de los principales clubes del panorama futbolístico ya programan sus agendas para encontrar al futuro Messi o al nuevo Ronaldo en los Mundiales sub-20 y sub-17 y en el Europeo sub-21. Durante el verano también podremos disfrutar de la Confederaciones, de la Copa Oro y de un fútbol cada vez más emergente como es el femenino, con la Eurocopa de Holanda. Suficientes motivos para que los amantes de este deporte sigan enganchados a sus televisores, sus tablets o cualquier aparato que tengan por casa. La pelota empieza a rodar de nuevo.

I. DESBANDADA A LA AFRICANA
Copa Africana de Naciones (Gabón, 16 de enero – 5 de febrero)

La primera competición de selecciones de este 2017 viajará por segunda vez hasta territorio gabonés desde que se inaugurara el torneo en Sudán hace 60 años. Repitiendo el patrón de las últimas ediciones desde la globalización del fútbol, la Copa Africana de Naciones se convertirá en un quebradero de cabeza para muchos clubes del Viejo Continente, que verán como algunos de sus futbolistas cierran su taquilla del vestuario por un periodo demasiado largo mientras las competiciones siguen su curso. Con las listas de convocados y sus descartes ya confirmados, los entrenadores franceses son los que más motivos tienen para lamentarse, ya que casi una setentena de jugadores que compiten en el país galo abandonaran a sus compañeros hasta el 5 de febrero, en el caso de llegar a la final. Los siguientes países más afectados serán Inglaterra, con 39 representantes en el torneo; Portugal, que sumará cerca de 25 fugas gracias a (o por culpa de, como quieran verlo) la primera clasificación de Guinea-Bisáu—excolonia lusa que cuenta con muchos futbolistas en la liga portuguesa— para disputar el torneo; y Turquía, con una veintena de futbolistas.

II. OJEANDO POR ASIA
Mundial sub-20 (Corea del Sur, 20 de mayo – 11 de junio)

Corea del Sur será el primer destino de los ojeadores en un año cargado de torneos de categorías inferiores. El país asiático albergará el Mundial sub-20 a partir del 20 de mayo y será un escaparate para que las promesas del fútbol mundial llamen la atención de los mejores clubes. Con la totalidad de participantes aún por concretarse —falta saber los representantes de América y África— Alemania, Portugal, Francia, Inglaterra e Italia, los clasificados del Viejo Continente, parten como los principales candidatos al título, a la espera de conocerse si Argentina y Brasil, los países con más conquistas en esta competición, estarán presentes en Corea.

III. PRUEBA DE FUEGO PARA EL ANFITRIÓN
Copa Confederaciones (Rusia, 17 de junio – 2 de julio)

La Copa Confederaciones se presenta cada año que se disputa como el preludio del Mundial y toda una prueba de fuego para analizar la organización del equipo anfitrión, que repetirá al año siguiente con la madre de todas las competiciones y ya se ha visto salpicada por los casos de dopaje que han manchado el deporte ruso. Este será el primer torneo futbolístico que se celebre en tierras rusas desde la disolución de la Unión Soviética en 1991, el único precedente fue la Eurocopa de 1960, de la que ha llovido ya más de medio siglo. En esta edición, los grandes aspirantes a llevarse el trofeo de campeón serán Alemania y dos debutantes, Chile y Portugal. Los campeones del mundo, de América y de Europa tendrán así la oportunidad de llevarse por primera vez el torneo que reúne a los últimos ganadores de los torneos de cada una de las confederaciones futbolísticas del globo terráqueo.

IV. LA CONQUISTA DE LA PEQUEÑA EUROPA
Eurocopa sub-21 (Polonia, 16 de junio – 30 de junio)

Polonia será el segundo punto de encuentro para aquellos que quieran examinar a las futuras estrellas del deporte rey. A partir de mediados de junio, en tierras polacas se reunirán las mejores selecciones europeas sub-21 para conquistar la vigesimosegunda edición de este torneo, que para esta ocasión aumentará el número de participantes y pasará de ocho a 12 selecciones, encuadradas en tres grupos para decidir los semifinalistas de un torneo que se presenta muy igualado. Italia y España entran en grupo de favoritas por ser las más laureadas, con cinco y cuatro títulos respectivamente; pero el desarrollo de las categorías inferiores que han vivido Alemania y Portugal invitan a pensar que no habrá claros candidatos.

V. LA ETERNA LUCHA MÉXICO-ESTADOS UNIDOS
Copa Oro (EE.UU., 7 de julio – 26 de julio)

La máxima competición de selecciones de la Concacaf (Confederación de Norteamérica, Centroamérica y el Caribe de Fútbol) podría resumirse como una batalla entre México y Estados Unidos para ver quién domina el fútbol —o el soccer— de la ‘otra’ América futbolística, esa que va desde el océano Ártico hasta el istmo de Panamá. Con 13 ediciones a las espaldas, la Copa Oro solo ha visto una final en la que no estuvieran alguno de los dos grandes exponentes de su fútbol, fue en el 2000 cuando Canadá y la invitada Colombia les destronaron en cuartos de final y más tarde se jugaron el título, que cayó en manos de los canadienses por primera y única vez en su historia. Centroamérica y el Caribe parecen aún muy lejanos a poder dar la campanada. Y los recuerdos de la Copa Concacaf que se jugó entre los ’60 y los ’80, cuando ellos eran los grandes dominadores, han quedado muy borrosos.

VI. RETOS EN HOLANDA
Eurocopa Femenina (Holanda, 16 de julio – 6 de agosto)

El auge del fútbol femenino contará con los paisajes de Holanda como telón de fondo durante este verano. Las futbolistas cuentan cada vez con mayor atención por parte de los medios, empiezan a llenar estadios e incluso han llegado a los videojuegos. La próxima Eurocopa será el gran acontecimiento del año para el fútbol femenino y una nueva oportunidad para que su desarrollo y expansión sigan creciendo del mismo modo que lo ha hecho en este último lustro. Junto a este reto, las selecciones participantes tienen otro objetivo por delante: desbancar a Alemania de su particular reinado en esta competición. Las teutonas suman ocho Eurocopas, las últimas seis de manera consecutiva, y solo Noruega en dos ocasiones y Suecia han sido capaces de superar a Die Nationalelf en las 11 ediciones que se han disputado.

VII. EL PODERÍO FÍSICO AFRICANO
Mundial sub-17 (India, 6 de octubre – 18 de octubre)

La particular ruta en masa de los ojeadores en este 2017 pondrá su punto y final en la India durante el mes de octubre en una competición que cuenta con un palmarés llamativo. De los ocho países que han conquistado el Mundial de selecciones absolutas, solo Brasil, con tres títulos, y Francia, con uno, pueden presumir de haber ganado alguna vez el Mundial sub-17. La competición la domina el fútbol africano con siete triunfos —cinco de Nigeria y dos de Ghana—, unos números que invitan a pensar en la superioridad física de los africanos en esas edades si se comparan con los éxitos de su continente al superar la mayoría de edad. En octubre veremos si en esta nueva edición el poderío físico de África vuelve a vencer o si la técnica y el rigor táctico europeo consigue sobrepasarlos.