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Niczzy: “Aduriz nos daba muchísima alegría”

"Solo pisar el suelo y decir 'hola, San Mamés' a la gente. E irme. Solo con eso yo ya sería feliz", dice Niczzy. Acaba de publicar su primer disco, 'Ahora no lloro'

“Yo he pasado por el fútbol, por el baloncesto, luego que si el baile, que si no sé qué y, mira, acabé haciendo música. Y aquí me quedo, porque la verdad es que siento que es lo único que tengo en la vida. Lo único que me llena”, asegura el cantante Niczzy (2003), dominicano de nacimiento y bilbaíno de adopción. Habla con la voz ronca tras pasar horas en un estudio de Barcelona. “A mí lo que me motivaba de pequeño era que la gente me coreara y que me aplaudiera. Veía a la gente cantando encima de un escenario en los Billboard o en los Grammy y pensaba que quería ser como ellos. Y poco a poco me atreví a hacerlo. Antes no me atrevía a cantar. Creo que la juventud lo que tiene que hacer es atreverse. Siempre hay un ‘¿por qué no?’. Y si no es una cosa, a otra: el tema es seguir el camino. Creo que hagas lo que hagas siempre vas a llegar a algo que has querido de pequeño”, subraya. Sus letras están repletas de referencias futbolísticas, con citas a Mbappé, Figo o Pelé.

En tan solo tres años de carrera ya acumula millones de reproducciones en YouTube y Spotify, convertido en un referente musical de las nuevas generaciones y de la escena urbana.“Todo me ha venido muy rápido, nada más empezar. He podido hacerme un nombre y ahora estoy intentando moldear un poco lo que es mi futuro”, afirma. Este viernes publica su primer disco, Ahora no lloro: “Me hace mucha ilusión. Yo vengo de hacer un solo género [drill] y ahora estoy diversificando mi música con otros estilos. Navegar en nuevas aguas. Con este disco quiero demostrarle a la gente de lo que soy capaz y que no estoy estancado en lo mismo. Este álbum es un logro, como una meta cumplida más”. “El fútbol me ha motivado en algún momento. De decir ‘joder, ojalá estar ahí’. Y no lo he conseguido porque no he sido bueno y porque no me ha gustado tanto jugarlo. Pero la vida te lo paga de otra forma. Das conciertos en los que gracias a Dios hay bastante peña cantándote las canciones y dices ‘joder, lo estoy consiguiendo poco a poco'”, señala Niczzy.

Aterrizó en las afueras de Bilbao de niño y pronto se sintió atraído por el fútbol, y por el Athletic Club, en gran parte por influencia de su padrastro. “Yo soy del Athletic desde pequeñito. Fue el primer equipo de fútbol que me metieron en la cabeza. Y me gustó lo de tener un equipo fijo. No ser el mítico al que le gusta el Madrid o el Barça porque siempre ganan”, asiente. Cree recordar que su primera vez en San Mamés fue en una victoria contra el Rayo Vallecano, en 2014 o 2015. “Fue una bonita experiencia. Recuerdo pensar que era muy grande. Y flipar con toda esa gente ahí aplaudiendo. Recuerdo que estábamos arriba del todo y me decía ‘buah, ¿en serio estoy viendo a los de la tele?'”.

 

“Yo soy del Athletic desde pequeñito. Fue el primer equipo de fútbol que me metieron en la cabeza. Y me gustó lo de tener un equipo fijo. No ser el mítico al que le gusta el Madrid o el Barça”

 

En esos mismos años debutó Iñaki Williams. “Fue guay porque al final en esos momentos los niños aún eran como un poco racistas” y la presencia de Williams en San Mamés fue una ayuda para muchos chavales como él: tanto hacia afuera, porque acabó de normalizar la presencia de personas negras en la sociedad vasca, como hacia dentro, porque ejerció como referente: “Fue más por mí, por decir ‘que les den por culo’. Para mí era un ídolo”. De hecho, hoy lo sigue siendo: luce camisetas de Williams en más de un videoclip y en más de un concierto. “Lo he podido conocer y me ha tratado genial. Que tu ídolo te apoye, pero no subiendo una storie, sino estando en persona y diciéndote ‘ey, ¿qué tal? ¿Cómo va la música? Me gustó el tema que sacaste’, mola. Mola mucho. Te motiva y te hace decir ‘coño, mira lo que he conseguido'”, admite. “Nos hemos hecho tope colegas, pero aún me pongo nervioso cuando hablo con él”, dice.

Se sincera: “Si hablamos de fútbol, el jugador al que más he admirado es Aduriz. A mí me molaba mucho. Me molaba ese aura que transmitía. Las ganas que le ponía. Su hambre. Y, además, marcaba en el momento perfecto. Siempre. Él era la alegría, tío. Cuando marca tu equipo te alegras, pero cuando marcaba Aduriz yo sentía toda la alegría del mundo”. “Es lo que necesitaríamos ahora”, reconoce en presente.

Guarda la Supercopa de España de 2015 como su mejor recuerdo futbolístico. Vivió la ida, aquel 4-0 con un gol de volea de Mikel San José desde el centro del campo y un hat-trick de Aduriz, en las calles de Bilbao. “Bilbao estaba lleno de pantallas, con todo el mundo viendo el partido. Creo que hasta lloré. Mi madre me dijo ‘a las 10 en casa’. Ese día me dejó más porque jugaba el Athletic, pero, claro, si a las 10 tenía que estar en casa no podía hacer nada. Ahora gana el Athletic y hay que ir a recogerme”, sonríe. Sigue disfrutando y sufriendo con el equipo: dice que paga DAZN solo para ver sus encuentros. Tiene una canción llamada San Mamés y este lunes colgó una foto del estadio en Instagram. Canta “sonando en la radio / también por el barrio / pronto en un estadio”, en Mi funeral, y reconoce que le encantaría sonar en San Mamés: “Solo pisar el suelo y decir ‘hola, San Mamés’ a la gente. E irme. Solo con eso yo ya sería feliz”. En Bloque canta “hemos salido del bloque / pero no pierdo el enfoque”.

“Me gusta mucho enfocarme en Bilbao. Todo el mundo quiere ser famoso en su ciudad y quiere ganarse su cariño. Cuando juegas al fútbol y llegas a Primera con el Athletic todo el mundo te da su cariño y a mí me gustaría conseguir lo mismo en la música. Yo ahora mismo es como que estoy en la cantera y mi meta es llegar a Primera. Es como un sueño. Para ganarme el cariño de mi ciudad, aunque no sea de aquí ni criado aquí. Bueno, criado sí. Porque desde pequeño veo el cariño que le da Bilbao a la gente que les representa y lo que que quiero es representar a mi ciudad”, concluye. Destaca que lo más grande a lo que puede aspirar un músico o un futbolista es a representar, a brindar identificación: “Siento que con la música puedes llegar a transmitir muchas cosas y muchos sentimientos, como con el fútbol. A mí me hablan chavales de que mis temas les arreglan la vida. De verdad”.

 


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Fotografía de Sony Music.