El 18 de diciembre del 2022 a las 20:55 hora de Doha, Argentina subió el último escalón de un sueño que cosechó críticas, pesadillas, lágrimas y enojos. Posiblemente haya sido el paso más justo en la historia del fútbol de las últimas décadas y le regaló al planeta una sonrisa a pura humildad y talento. En un Mundial marcado a fuego por las denuncias por corrupción, muertes de miles de obreros y modificado por las olas de calor, ver a Lionel Andrés Messi levantando la Copa del Mundo fue, para muchos, entrar en el cielo.
El Lusail se vistió de celeste y blanco. Pocos franceses en las 89.000 butacas de este estadio último modelo. La hinchada argentina entonó el himno de Muchachos. Jeques, Bisht y demás símbolos árabes mostraron las puertas de ingreso a este cielo que solo reconoce ocho banderas: Brasil, Italia, Alemania, Argentina, Francia, Uruguay, Inglaterra y España.
Cerró su quinto capítulo en los Mundiales con la gloria máxima. Se dio la posibilidad de que el último baile de Messi fuera a todo brillo y con sonrisas, y el tiempo le dio la razón a Pablo Aimar: “El último Messi siempre es el mejor”
Posiblemente en estos tres años que quedan hasta la próxima edición, Argentina sea la encargada de musicalizar a puro cuarteto, mientras todos debaten en gramos el peso de la Copa del Mundo y recuerdan los grandes logros. En algún momento, Messi parará la fiesta y contará, al ritmo de Rodrigo, cómo fue su “largo camino al cielo”. Seguro que lo hace con más gracia, pero no se olvidará de ninguno de estos cinco capítulos:
1. “Perdón por no poder defenderte”
Messi ha disputado 26 partidos en 5 Mundiales, con 16 triunfos, 5 empates y 5 derrotas. En Alemania 2006, su debut se saldó con un par de minutos (con gol incluido, eso sí) en la goleada 6-0 contra Serbia y Montenegro. Fue titular por primera vez contra Holanda e ingresó contra México el día del gol de Maxi Rodriguez en el tiempo suplementario. Messi también fue el joven de 19 años que se quedó con los brazos cruzados, sin haber podido ingresar en la derrota y eliminación contra Alemania. Se debatió en los medios de comunicación argentinos cómo no entró a jugar en aquel partido el crack argentino. Se quedó ahí, sentado, en el banco de suplentes, sin ocultar su fastidio. Argentina quedó entre los ochos mejores.
2. “Los héroes son de mentira”
Sudáfrica 2010 fue el siguiente capítulo. Con Diego Armando Maradona en el banco y después de una dura fase de eliminatorias, la celeste y blanca entró con lo justo a la Copa del Mundo. Leo, con 23 años, jugó todos los partidos: contra Nigeria, Corea del Sur, Grecia, México y Alemania, pero se fue sin poder gritar ni un gol. “Hizo figuras a todos los arqueros”, lo defendió Maradona. Entre esos partidos, fue capitán y le costó más la arenga previa que el partido en sí. La ilusión se desvaneció por un 4-0 contra los germanos. Argentina volvió a quedarse en el quinto partido.
3. “Alejandro, un ejemplo de la vida”
En Brasil 2014, ya con 27 años, fue individualmente decisivo para sacar adelante el equipo: primero contra Bosnia, luego frente a Irán (al que le marcó un gol agónico) y por último contra Nigeria, cuando el panorama se complicaba. Luego, arrancó la fase final. Ante Suiza, asistió a Di María para que decantara la balanza, pero tras erse partido su papel se desdibujó. Argentina, dirigida por Alejandro Sabella, avanzó hasta la final y el protagonismo lo comenzó a tener Javier Mascherano con la frase de “hoy te convertís en héroe” en la tanda de penaltis contra Países Bajos. ¿La final? Contra Alemania, perdida por 1-0, y el Diez, que podría haber sido determinante, no llegó a cambiar el rumbo del partido. Subcampeón del Mundo, pero ganador del Balón de Oro.
4. “Seguro que seré el más criticado”
Entre la final del 2014 y el debut en Rusia 2018, Messi dejó la selección. El 27 de julio del 2016, tras perder la final de la Copa América Centenario ante Chile por penaltis, aseguró: “Esto no es para mí”. Si bien regresó semanas después en la próxima convocatoria, el fastidio que tenía por los resultados deportivos era evidente. Le puso el cuerpo y desembarcó en su cuarto Mundial. Empezó con un paso en falso con un penal errado y terminó con el pedido de falso nueve por parte del técnico Jorge Sampaoli. Aunque en medio marcó un gol clave ante Nigeria, las divisiones en el vestuario se reflejaban en la cancha. En la fase de grupos, la cara de Messi minutos antes del pitido inicial de cada partido era clara: había cierto fastidio. Cuando sonaba el himno, se tapaba la cara y se lo veía incómodo. Tras terminar el Mundial, se confirmó que puertas adentro la situación con el DT era tensa. De los cuatro partidos de Rusia 2018 empató contra Islandia 1-1, perdió 3-0 ante Croacia (que terminaría siendo subcampeona del mundo), ganó 2-1 ante Nigeria y perdió 4-3 contra Francia (que terminaría levantando la copa). Argentina jugó cuatro partidos y perdió contra las dos mejores selecciones.
5. “Tu vida fue un tango”
En Catar 2022, la ilusión volvió. Si bien Argentina comenzó perdiendo 2-1 ante Arabia Saudita, Messi después de la derrota aseguró: “Que la gente confíe”. Y cumplió. Se impuso 2-0 ante México y luego 2-0 ante Polonia y consiguió el primer puesto del grupo C. Se cruzó con Australia, a la que ganó por 2-1, y Messi llegó a los cuartos de final. Esta vez contra Países Bajos, un encuentro que arrancó sencillo, pero se complicó sobre el final: terminaron 2-2. Alargue, penales y Argentina pasó a la semifinal. Le tocó contra Croacia, en que el Diez brilló y ganó su pase a la final con un contundente 3-0.
Messi ha disputado 26 partidos en 5 Mundiales, con 16 triunfos, 5 empates y 5 derrotas. Tardó más de quince años en salir campeón
La final ante Francia se convertiría en una especie de revancha. Durante 80 minutos, Argentina dominó y marcó dos goles. Pero los festejos iban a tener que esperar. En tan solo tres minutos, Francia empató y alargó la cuestión. A los 30 minutos del suplementario se repitió la historia: Messi marcó el 3-2, pero minutos antes de que finalizase el choque, Mbappe igualó y mandó todo a los penaltis. Ahí, el ‘Dibu’ Martinez se convirtió en héroe de nuevo: atajó dos disparos y la tanda terminó 4-2, con Argentina corriendo hacia la tercera estrella.
De esta forma, la tercera fue la vencida. Argentina había perdido las anteriores dos finales del mundo que disputó: Italia 1990 y Brasil 2014. Con un Messi que jugó completo los siete partidos y fue el mejor jugador de la última edición de la Copa del Mundo. Cerró su quinto capítulo con la gloria máxima. Se dio la posibilidad de que el último baile de Messi fuera a todo brillo y con sonrisas, y el tiempo le dio la razón a Pablo Aimar: “El último Messi siempre es el mejor”.
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Fotografías de Getty Images.