“Goles de Bruselas”, decía el titular de la previa de Mundo Deportivo del partido de la Liga de Campeones entre el Real Madrid y el Anderlecht del martes 5 de diciembre del año 2000. “El Anderlecht ha ganado sus cuatro últimos duelos de la Champions y ha marcado diez tantos”, añadía el texto para argumentar su titular. El partido correspondía a la segunda jornada de la segunda fase de grupos. “El Arsenal afronta un encuentro de vital importancia para su futuro en la Champions League. Tras ser goleado en Moscú no puede tropezar ante el Bayern en Londres”, añadía Mundo Deportivo dos páginas más adelante.
En la primera jornada el Arsenal había caído por 4-1 contra el Spartak, con un gol de Sylvinho, y el Bayern había ganado al Olympique de Lyon de Coupet, Edmílson, Marc-Vivien Foé y Sonny Anderson, con un gol de Jens Jeremies. Los dos conjuntos habían superado la primera fase de grupos de la Liga Campeones: el equipo inglés por delante de la Lazio y el cuadro alemán por delante del Paris Saint-Germain.
El primer partido de la historia entre ambos equipos se disputó en Highbury, con las bajas de los visitantes Jancker y Lizarazu y los locales David Seaman, Parlour y Sylvinho. “La plaza del lateral brasileño será cubierta por el joven Ashley Cole, de 19 años”, avanzó Mundo Deportivo. El día después el periódico afirmaba que Jimmy Floyd Hasselbaink y Marcelo Salas eran los delanteros “más deseados” para reforzar el Barcelona en enero y hablaba de “un Bayern con casta” porque supo remontar un 2-0 adverso en Londres: “El Bayern de Múnich demostró su condición de alemán: cuando parecía más difícil que pudiera reaccionar ante la superioridad del Arsenal (2-0), el equipo bávaro empató el partido en diez minutos y logró mantenerse líder”.
El primer partido de la historia entre ambos equipos se disputó en Highbury. Viera recuperó la pelota en campo contrario y una bella combinación entre Kanu y Henry prologó el 1-0
Arsène Wenger jugó con Manninger; Luzhny (Lauren), Keown, Adams, Cole; Ljungberg, Vieira, Grimandi, Pirès (Wiltord); Kanu y Henry y Ottmar Hitzfeld optó por Kahn; Linke, Sforza, Kuffour; Sagnol (Paulo Sérgio), Jeremies, Effenberg, Tarnat; Salihamidžić; Élber y Scholl (Zickler). Bergkamp y los visitantes Patrik Andersson y Roque Santa Cruz, de 19 años, vieron el partido desde el banquillo. Desde ahí vieron el primer gol del partido, cuando apenas habían transcurrido tres minutos. Viera recuperó la pelota en campo contrario y una bella combinación entre Kanu y Henry prologó el 1-0, obra del ’14’. El 2-0 caería en el minuto 54: una gran transición comandada por Henry terminó con un pase atrás para que Kanu batiera a Kahn. Su disparo al primer toque acabó en las mallas después de rebotar en el palo.
Tarnat recortó distancias solo dos minutos después, a pase de Élber tras una falta sacada por Effenberg. En el 66′ llegó el 2-2 definitivo, mientras las vallas publicitarias de Highbury promocionaban la nueva entrega del Tekken. Scholl resbaló al chutar una falta, pero el resbalón mejoró su disparo. Entró por la escuadra del austríaco Manninger, más tarde portero de la Juventus. El Bayern vestía de rojo Adidas, con publicidad de Opel. El Arsenal vestía de amarillo Nike, con publicidad de Sega. Fue el día número 50 en la Liga de Campeones de Oleg Luzhny, defensa ucraniano que había recalado en Londres procedente del Dynamo de Kiev.
El mismo día el Olympique de Lyon venció al Spartak de Moscú por 3-0 con un gol de Steve Marlet y un doblete de Sonny Anderson, para dejar al Arsenal en la última posición del grupo. La página de Mundo Deportivo que relataba los dos partidos contaba: “Stan Collymore ha añadido otro capítulo a su larga lista de incidentes dentro y fuera del campo. En la madrugada del domingo el delantero del Bradford sufrió cortes en la cara y magulladuras en el club de Birmingham donde celebraba el triunfo sobre el Coventry (2-1) con un gol suyo. Al parecer todo empezó cuando seguidores del Birmingham le increparon por haber jugado en el Aston Villa, el gran rival ciudadano”. Ese invierno aterrizó en el Carlos Tartiere para jugar en el Oviedo.
El segundo partido entre el Arsenal y el Bayern, correspondiente a la sexta y última jornada de esa segunda fase de grupos, se jugó el 14 de marzo de 2001. El día antes el Deportivo de la Coruña y el Valencia habían confirmado el pase a cuartos de final como primeros de grupo, tras empatar contra el Milan y ganar al Panathinaikos. Y El País había revelado que el Bayern había castigado al defensa Samuel Kuffour: “El Bayern de Múnich ha multado con 830.000 pesetas a Kuffour, de 24 años y con contrato hasta 2003, por mantener negociaciones con el Barça. El presidente azulgrana, Joan Gaspart, negó los contactos con el futbolista”. La previa de Mundo Deportivo recogió unas polémicas declaraciones de Élber: “No le tengo respeto al Arsenal porque no es nada del otro mundo. Al Manchester sí”.
El Arsenal cayó en cuartos ante el Valencia, superado por el Bayern en los penaltis de la final. Los alemanes conquistaron su cuarta Liga de Campeones, la primera desde los títulos de 1974, 1975 y 1976
El texto aseguraba que “las autoridades germanas extremarán las medidas de seguridad contra la fiebre aftosa ante la llegada de hinchas ingleses” y explicaba: “Bergkamp es noticia por su ausencia esta noche en el Olímpico, ya que se especula con que puede no existir el tirón muscular puesto como excusa para su baja. No es la primera vez que ante un partido europeo fuera de casa Bergkamp, con pánico a volar, pone como razón de su ausencia una lesión. Ya lo hizo ante el Dépor hace un año. Curiosamente Wenger le había autorizado a viajar por carretera tras pedirlo el jugador y dos días antes anunció una lesión, como ahora. Hace un mes ante el Lyon pasó lo mismo”. “La excusa oficial es una lesión, pero podría estar castigado por negarse a viajar en avión”, apuntaba la previa de Mundo Deportivo.
Ambos equipos vistieron, como en Highbury, con sus colores visitantes, de gris el Bayern y de rojo el Arsenal. Y el triunfo se quedó en el Olímpico de Múnich gracias a un tanto de Élber en el ’10’. Lizarazu centró sin oposición desde la izquierda y Élber cabeceó sin oposición desde la frontal del área pequeña. Fue un cabezazo imposible para Seaman, de nuevo bajo palos. El atacante brasileño acabaría esa Champions League con seis goles, uno menos que el pichichi, Raúl González, y los mismos que Diego Alonso (Valencia), Lee Bowyer (Leeds United), Iván Helguera (Real Madrid), Mário Jardel (Galatasaray), Rivaldo (Barcelona) y Paul Scholes (Manchester United). La derrota del Arsenal dejó el segundo puesto y la clasificación en bandeja al Olympique de Lyon. Pero solo pudo empatar en Moscú y los billetes fueron para bávaros y ‘gunners‘.
El Bayern venció al Manchester United en cuartos de final (0-1 en Old Trafford con gol de Paulo Sérgio y 2-1 en Múnich con tantos de Élber y Scholl y de Giggs), vengándose de la final del Camp Nou (1999), y al Real Madrid en semifinales (0-1 en el Santiago Bernabéu con gol de Élber y 2-1 en Alemania con dianas de Élber y Jeremies y de Figo). El Arsenal cayó en cuartos de final ante el Valencia, superado por el Bayern en los penaltis de la final. Fue el 23 de mayo de 2001 en Milán. “No hay ningún tipo de consuelo”, afirmó Héctor Cúper tras la segunda derrota consecutiva del Valencia en la final. El Bayern conquistó su cuarta Liga de Campeones, la primera desde los títulos de 1974, 1975 y 1976.
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Fotografía de Getty Images.