Este artículo, firmado por Víctor Gómez y Federico Greco, fue publicado originalmente en la web de Wanderers, socio digital de Panenka.
En los años precedentes a la Primera Guerra Mundial en Italia hay un equipo formado sólo por jugadores italianos que está revolucionando el fútbol. Primero se hacen con la victoria en la Segunda División en 1907, después, aprovechándose de las luchas internas en el seno de la Federación Italiana de fútbol, el título de Campeón de Italia en 1908. Este equipo es la Pro Vercelli, que gana cinco Scudetti en seis años y cierra la temporada del quinto Scudetto, temporada 1912/13, imbatido. Es el primer equipo en conseguir esta empresa desde que se necesitan varios partidos para ganar el título. Los números son los siguientes: 9 victorias y un empate en la fase del Piamonte, en las eliminatorias finales de Italia Septentrional obtienen 7 victorias y un empate y golean por 6-0 a la Lazio en la final nacional. Un total de 19 partidos, 17 victorias, 2 empates y sólo 3 goles encajados por los 65 realizados.
Todo esto nos acerca a Turín, el 1º de mayo de 1913, al partido amistoso de la selección italiana contra Bélgica. Nueve de los once jugadores son de la Pro: Innocenti, Valle, Ara, Giuseppe Milano, Leone, Felice Milano, Berardo, Carlo Rampini y Corna. Únicas excepciones el futuro capitán del Genoa Renzo De Vecchi, todavía en el Milán, y Fresia, jugador del Andrea Doria. Los piamonteses tenían otra camiseta, pero las mismas ganas de ganar, el centrocampista Ara cerrará el partido con un gol en el 57’ y al final del partido, a Vercelli, llegó un elocuente telegrama: “Pro Vercelli batte Belgio 1-0” (Pro Vercelli gana a Bélgica 1-0) o así lo cuenta la tradición.
Pasarán diez años y en la temporada 1922/23 el equipo entonces más laureado, el Genoa Cricket and Football Club, conquista su octavo Scudetto con una temporada similar a la de la Pro Vercelli 1912/13. En el grupo B de la Lega Nord el Genoa acaba primero con 17 victorias y 5 empates. Después ganará el grupo final batiendo dos veces al Padova e empatando a la ida y ganando a la vuelta contra la Pro Vercelli. En la final contra el campeón de la Lega Sud, de nuevo la Lazio, salen ganadores cerrando la temporada con 22 victorias y 6 empates, 75 goles realizados y sólo 21 recibidos. La columna vertebral de los grifoni de este club la formaban el portero De Prá, el capitán De Vecchi, el defensa Ottavio Barbieri y el goleador Catto. Todos ellos dirigidos por Willy Garbutt, el primer míster de la historia del calcio italiano. Los grifoni, después de 33 partidos sin perder, caerán en Livorno por 3 a 1 el 11 de noviembre d 1923, mientras que la Pro se mantuvo invicta desde el 12 de noviembre de 1911 (Inter 2-1 Pro Vercelli) al 15 de febrero de 1914 (Genoa 1-0 Pro Vercelli): ¡una serie de 46 partidos imbatidos!
Las conquistas de Pro Vercelli y Genoa son realmente impresionantes pero realizadas en un calcio primigenio. El encanto y la dificultad del grupo único son, sin embargo, otra cosa. Desde que fue instituido en la temporada 1929/30 las cosas cambiaron radicalmente. Ni la Juventus de los cinco Scudetti consecutivos (1931-1935), ni el Grande Torino, consiguen finalizar la temporada sin ser derrotados, ni siquiera con las cinco ligas consecutivas, ni estableciendo el récord de imbatibilidad italiano. En Turín, los bianconeri estuvieron imbatidos desde el 3 de enero de 1932 al 29 de marzo de 1936 durante un total de 71 partidos, mientras que los granata desde el 31 de enero de 1943 al 6 de noviembre de 1949 durante un total de 89 partidos.
Debemos esperar al año futbolístico de 1955/56 y la Fiorentina de Fulvio Fuffo Bernardini para encontrar un equipo verdaderamente imbatible en Serie A: Sarti; Magnini, Cervato; Chiappella, Rosetta, Segato; Julinho, Gratton, Virgili, Montuori y Prini. Es la Fiorentina de Fuffo Bernardini, que el año siguiente disputaría la final de la Copa de Europa contra el Real Madrid.
Los viola vencen su primer Scudetto con cinco jornadas de anticipo, golean por 4-0 a la Juventus en Turín (una gran satisfacción por la rivalidad entre ambos clubes) y cierran la temporada con 12 puntos sobre el segundo clasificado. Un abismo si consideramos que la victoria vale dos puntos y el campeonato es de 18 equipos. Pero resbalarán en su último partido. Después de 20 victorias y 13 empates, 58 goles realizados y 17 encajados, la Fiorentina pierde en la última jornada en casa del modesto, y ya salvado, Genoa. La derrota no es casual, ya que los grifoni, celosos de su récord de imbatibilidad que comparten con la Pro Vercellí, llegan al último partido con ganas de estropear la fiesta viola. El partido estaba encaminado con el 0-1, pero en el último cuarto de hora la Fiorentina se deja escapar el record dejándose remontar y encaja 3 goles del Genoa.
La Fiorentina se igualará a sí misma en la temporada 1968/69 con una temporada ganando la Serie A con 45 puntos, 16 victorias, 13 empates y una derrota. En el decenio sucesivo, el Torino de 1976/77 y la Juventus de 1977/78 igualarán el récord de la Fiorentina. A los bianconeri el récord les valió el Scudetto, pero los granata debieron contentarse con el segundo puesto detrás de la “Juventus de los 51 puntos” con 21 victorias en 30 partidos.
En esa década se verá otro equipo imbatible, será el ‘Perugia dei miracoli’ de la temporada 1978/77. El equipo de Ilario Castagner realizó un récord increíble para un equipo menor, un equipo de provincias, pero que cuenta con un futuro campeón del mundo, Salvatore Bagni, y hombres con experiencia como Malizia, Frosio, Della Martira, Speggiorin y Vannini. Sin embargo la felicidad no fue total, el club viene de un trágico suceso con la muerte sobre el césped de Renato Curi. El récord de imbatibilidad no sirvió para la victoria del Scudetto, los biancorossi llegarán segundos, detrás del Milan de Liedholm. El mismo Milan se quedará a las puertas de la imbatibilidad en la 1987/88, ganando el Scudetto con una sola derrota. Será el Milán de Sacchi y las dos Copas de Europa.
En 1991/92 Fabio Capello sustituye a Sacchi en el banquillo de los rossoneri y consigue lograr lo que su predecesor y el Perugia no habían conseguido. El equipo de Baresi y Maldini, de Donadoni y Ancellotti y de los tres holandeses Gullit, Van Basten y Rijkaard llegará a conquistar el Scudetto con 56 puntos, 22 victorias, 12 empates, 74 goles realizados y 21 encajados. La derrota en la vuelta de la semifinal de Coppa Italia, 1-0 en casa de la Juventus privó a los rossoneri de acabar la temporada sin ninguna derrota en partidos oficiales. El Milan se mantiene imbatido durante 23 partidos de la 92/93, llegando a un total de 58 partidos consecutivos sin conocer la derrota. Después perderá con el Parma y la Juventus, pero conquistará un nuevo Scudetto.
En el nuevo milenio, será el Inter de Roberto Mancini quien se acerque al récord en la temporada 2006/07, la posterior a Calciopoli. Los nerazzurri ganarán 17 partidos consecutivos entre la 8ª y la 25ª jornada, pero cuando el objetivo está cerca, perderán en casa contra la Roma, en el partido aplazado de la 20ª jornada.
Quien en cambio conseguirá establecer el último récord de imbatibilidad en Italia será la Juventus de Antonio Conte en la temporada 2011/12, pero como el Milan 91/92 la victoria en casa significará la ausencia de títulos europeos. Sólo el Napoli en la final de Coppa Italia conseguiría parar a los bianconeri.